SERGIO BENITEZ
¿Qué pasa si juntas canciones rancheras, cumbia, mambo, pop y rock con un toque de psicodelia y electrónica? La respuesta la tiene la agrupación de Tucson, Arizona, Orkesta Mendoza.
Pero el conjunto no solo fusiona ciertos elementos de la cultura musical de México y Estados Unidos. De hecho, se compone de músicos originarios de ambos países, lo que le ha permitido conseguir un sonido propio al asumir como suyos ritmos de la música de la frontera y retomando los mambos de Pérez Prado, mismos que son aderezados con elementos del rock norteamericano y hasta del mariachi.
Como es de suponerse, sus letras -cantadas principalmente en español- resultan en un retrato de la vida cotidiana de esa franja entre ambas naciones, por lo que sus letras hablan de temas como inmigración y discriminación, pero también de amor y fiesta.
De acuerdo con el propio vocalista y guitarrista de la agrupación, Sergio Mendoza, con esta banda buscan reivindicar la mezcla cultural y musical de la frontera, tocando ritmos latinos y manteniendo como base la música ranchera, aunque sin ignorar la evidente influencia que tienen del rock.
La banda se completa con James Peters (batería), Joe Novelli (lap steel guitar), Marco Rosano (saxofón, clarinete, acordeón y teclados), Salvador Durán (voz, cajón y maracas) y Sean Rogers (bajo).
Con poco menos de una década de vida, la Orquesta Mendoza cuenta ya con tres álbumes: Mambo Mexicano (2012), La Rienda (2014) y ¡Vamos A Guarachar! (2016).
Su experiencia sobre los escenarios también está creciendo, pues ya han sido parte de festivales dentro y fuera de los Estados Unidos, entre ellos WOMEX, Pachanga Latino Music Festival, Festival PortÁmerica (España), Sage Gateshead (Inglaterra) y Vive Latino (México).
Por todo lo anterior, no hay que perder de vista todo el ruido que Orkesta Mendoza seguirá haciendo en el futuro.