EMILIO REVOLVER
Si piensas que los sesentas son la mejor época de la música y que Morrison, Hendrix o The Beatles serán los máximos genios de hoy y siempre, esto va con cariño para ti.
Se llaman The Lemon Twigs. Sus principales influencias son el funk de los setenta, el rock de The Who y Queen y el pop sicodélico de los sesenta. Son una banda de dos hermanos, como los Kinks, Brian (guitarra, teclados, voz) y Michael (batería, teclados y voz) D´Addario.
Como los Stones, tienen ya un disco sin tener si quiera 20 años: Do Hollywood. Como The Beatles, todas las canciones las componen a dúo y desde su primer sencillo han causado una muy grata impresión, pues su canción “These Words” alcanzó las 180 mil visitas en Youtube durante su primer mes.
Suenan a lo que son: un grupo con todo a su favor. El padre de los D´Addario es músico y ellos crecieron con toda clase de instrumentos y vinilos raros de los sesenta y setenta a su disposición, así como todo el tiempo para ensayar, practicar y crear, en la capital musical del mundo: Nueva York.
Me da un poco de envidia escribir su historia. No es sorpresa, claro, que cada uno de ellos pueda tocar batería, guitarra, bajo o sintetizadores de maravilla, o que cada uno pueda hacerse de arreglos elegantes en la composición.
Sus sonidos hacen guiños todo el tiempo a grandes héroes del rock y pop y su primer y único trabajo hasta la fecha fue uno de los mejores de 2016. Do Hollywood está lleno de momentos emocionantes; es un torrente de júbilo adolescente al que se sumaron pulcros arreglos y vueltas de tuerca inteligentes.
Cabe decir que para este material consiguieron a Jonathan Rado, de Foxygen, como productor y a la emblemática 4AD, casa también de Ariel Pink o Stereolab, como disquera.
Aseguran que su siguiente material será un álbum conceptual y que uno de sus máximos deseos es trabajar en una ópera-rock. Tampoco sus videos tienen desperdicio. Al verlos pienso en que algo más de ellos me recuerda a esas primeras, germinales, bandas de rock: todas ellas en esencia eran alegría en estado puro, el doble golpe de la diversión y la creatividad.
El eterno espíritu de la juventud sigue pasando por los mismos atemporales acordes y escalas y sigue generando placer…
The Lemon Twigs nos recuerdan que todo es nuevo y todo es antiguo; que todo es nuestro, pero viene de muy lejos.
[…] dos excelentes trabajos producidos por él en menos de un año: el Upon A Lake, de Whitney, y el Do Hollywood, de The Lemon Twigs. Los tres dan fe del talento y ubicuidad de Rado, pero es un hecho que la grandilocuencia de Hang […]