SAMUEL VALDÉS • Pop de funeral.
El sonido gótico británico siempre ha sido relacionado con peinados extravagantes, maquillaje y un énfasis en el color negro. Aunque The Last Harbour, oriundos de Manchester pero separados a lo largo de la isla, evitan caer en los estereotipos del género, manteniendo solo el sonido clásico de dicho estilo.
Empezando su carrera con un disco generalmente folk en 2005 (Hold fast, Pioneer), la banda funcionó como un colectivo de músicos que iban y venían, siempre alimentados por la voz y presencia del cantante Kevin Craig, encargado también de diseñar las portadas y algunos de los videos que colocarían a la banda en una tonalidad de negro no muy lejana a la descrita por autores como Edgar Allan Poe y Mervyn Peake.
Dead Fires and the Lonely Spark encuentra a la banda enredándose en los sonidos puros góticos, acercándose al sonido de Black Heart Procession pero todavía con un método pop de composición, mientras que Volo fue un álbum conceptual que ya experimentaba con remixes y pasajes instrumentales.
The Last Harbour siempre ha tenido en mente el lado visual de su arte y en videos como “Lights” (fotografía/stop motion) y “Saint Luminous Bride” (miniaturas), que son algunos audiovisuales donde la banda detalla su mensaje.
Con Your heart, it carries the sound encuentran un sonido menos dark y más allegado al doom folk, con tintes de chamber que lo vuelven más elegante. Su disco más reciente, Caul, sigue esta línea, ahora con una alineación definida pero con un sonido que sigue moviéndose entre las sombras oscuras de una casona victoriana abandonada.
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