DANIELLA BOHNE • Tras un año y medio de actividades, el foro tapatío anunció su cierre definitivo. Aquí la versión de su fundador, Andrés Aguilar.
¿Qué le pasó al Salón Púrpura?
A.G.: “Finalmente no pudo sostenerse económicamente, quizás hubo un desbalance entre lo que necesitaban las bandas y lo que quería el público, quizás perdimos un poco de vista eso. Lo que estábamos vendiendo no era un producto que la gente quisiera consumir tan cotidianamente (…) la demanda quizá venía sólo una vez al mes. Ahí empezó a tener problemas el Salón… lo pudimos soportar año y medio, pero visto desde el punto de vista administrativo sino es sustentable se vuelve complicado”.
El Salón Púrpura abrió sus puertas hace un año y medio, aunque Andrés asegura que se trata de un proyecto que tiene sus antecedentes en espacios previos como el “Bar Perro” (a finales de los noventas), “El Anatómico” (2005) y el Laboratorio Sensorial (2007).
A decir de Aguilar, el Salón Púrpura se abrió para atender las necesidades de las bandas locales y con ello nutrir la experiencia de la música en Guadalajara: “Lo lanzamos para que las bandas experimentaran qué se siente estar en un escenario digno y bien sonorizado… Con una audiencia estimada de cien personas, las bandas tenían contacto con el público más íntimo”.
“Quisimos romper con esa tradición pero ella nos rompió a nosotros”
“Estuvimos trabajando para hacer alrededor de doscientos conciertos” –continúa Andrés. “Tuvimos una buena proyección, pero esto responde a una dinámica de que los bares tienen que renovarse constantemente para estar en boga, pero apoyar a las bandas independientes no tiene nada que ver con estar en boga y ahí es donde ya vas a contra corriente (…) Otros bares también lo intentaron con su propuesta y tuvieron una vida muy corta. Nosotros quisimos romper con esa tradición pero ella nos rompió a nosotros. Nos rebasó. Aunque no quiero minimizar el esfuerzo que hicieron todos los colaboradores: Se cierra el Salón Púrpura, pero no las ganas de seguir apoyando a la música, al arte y la cultura.
* Fotos tomadas del Facebook del Salón Púrpura.