MAURICIO ESPARZA-OTEO
Mercedes Nasta es más conocida por ser la voz de Disco Ruido, banda donde hace exactamente lo contrario a lo que ahora nos propone como solista.
Embarcada en un viaje que tiene más que ver con la introspección personal, la cantautora lanza Basalto; un disco que nos lleva por elegantes pasillos oscuros y habitaciones sonoras llenas de luz.
No es coincidencia que relacionemos la propuesta de Mercedes Nasta con la arquitectura y las artes visuales. De hecho, este álbum fue presentado hace poco en el Museo Rufino Tamayo, y su autora se ha presentado anteriormente en otras galerías de la Ciudad. de México. La misma portada del disco es una pieza realizada en colaboración con el prestigiado artista visual José León Cerrillo.
Todo lo anterior nos enmarca en un contexto diferente, ya que no sólo se trata de buscar espacios sonoros, sino también lugares físicos para expresar, contemplar y juzgar, como siempre se ha hecho en las artes visuales.
El de Mercedes Nasta es un proyecto inclasificable en el que sin embargo caben etiquetas tan opuestas entre sí como pop y ambient, electrónica y acústica, tropical y downtempo, donde el hilo conductor son las sensaciones y las emociones.
Se trata de un pop elegante e introspectivo, siempre marcado por un halo de misterio y por una extraña bruma de humo en donde apreciamos imágenes psíquicas que se asoman, recuerdos de la infancia y los libros, o simplemente ritmos pasivos que nos invitan a la reflexión. Todo acompañado de un canto que es como susurros al oído.