MAURICIO ESPARZA OTEO
Dentro del abanico multiopciones, colores, texturas y sonidos que nos ofrece la escena independiente mexicana, ahora alzan la mano los Cotton’s, re explorando un campo que bajita la mano ya tiene casi un siglo en este mundo, más allá de buscar la zanahoria de la vanguardia.
Su propuesta está íntimamente ligada con sus gustos por lo retro; en este caso concreto, explotan su amor por el swing, un estilo que surgió en Estados Unidos, a finales de los años veintes, como una ramificación del jazz.
Ya para los años treintas, el swing rápidamente se convirtió en el estilo más trendy y popular sobre el planeta tierra; era lo que marcaba la pauta de la vanguardia de la música comercial. El swing tiene un papel crucial en el árbol genealógico del rock, siendo un género que podríamos considerar padre del ska y abuelo del rock ‘n’ roll, y por lo tanto, bisabuelo de todo lo que vino después.
Así que los Cotton’s toman su nombre del mítico antro Cotton Club, de Nueva York; famoso por haber sido cerrado por la venta ilegal de alcohol durante la ley seca en los años veintes, y por los músicos que se presentaron ahí (Duke Ellington, Count Basie, Ella Fitzgerald, Louis Armstrong, Nat King Cole, Billie Holiday… Uff!), así que acá está la historia para donde voltees.
Eso es lo que nos propone Cotton’s; un quinteto mexicano contemporáneo que nos muestra un gusto implacable por el pasado, obvio por la música negra y el swing, y que, por supuesto, mezclan con un sin fin de referencias, pues aquí también hay algo de jazz, momento claros de blues y sus buenas dosis de rock…
Siempre muy bien resuelto, interpretado de manera implacable, con el debido respeto y veneración que se merece cuando se manosea la historia de estilos legendarios. Pero también con un punto de vista actual, donde están plasmados desde una actitud contemporánea, hasta la tecnología de hoy que también influye en el resultado final.
Hasta ahora solo han editado un EP homónimo de siete canciones y lanzado en 2013 por ellos mismos a través de Bandcamp, donde se puede escuchar íntegro o descargarlo con una módica cooperación. Una mezcla astuta que claramente nos quiere engañar, llevándonos por pasajes históricos, modas, estilos y distintas épocas; por momentos instrumental, frases por aquí en francés, por allá en inglés y luego cantando en español.
Los Cotton’s nos llevarán a un caleidoscopio multicolor, atemporal, lleno de fiesta. Y sin darnos cuenta, así de pronto, estamos en un viejo bar de Nueva York, infringiendo la ley seca, mientras al fondo toca una banda a la vieja usanza y en la barra compartimos un whisky con un tal Duke Ellington.
–