MARIO NICOLÁS BOLAÑOS
Hay un chico desconocido en México que se oculta detrás de ordenador, sintetizador y vocoder. Su nombre es Dante Díaz y su alter-ego es Vestron Vulture.
Cuándo lo escuche por primera vez yo tenía un rato clavado en el synthwave y el retro-future del Valerie Collective que lanzó a grupos como Electric Youth, Outrunners, Anoraak y College, por lo que pensé que Vestron Vulture bien podría ser parte de ese colectivo o de cualquier otro parecido, con ese estilo que nos recuerda la música de Giorgio Moroder, persecuciones de Miami Vice y cuanta cosa nos venga a la mente que pudimos haber hecho o dejado de hacer durante los ochenta, como no rebobinar la cinta de un VHS antes de entregarlo al videoclub.
Vestron Vulture también podría compararse con otros contemporáneos como Kavinsky, Com Truise y Tesla Boy, aunque ya casi supera la discografía de cada uno. Sólo hay que echar un vistazo a su bandcamp, donde se encuentran todos sus EP, álbumes y remixes.
Hasta ahora su música solo se consigue en formato digital y no pertenece a ningún sello. El año pasado los productores del videojuego de Play Station Hot Line Miami 2 incluyeron una de sus pistas llamada “New Wave Hookers” como tema principal para uno de los niveles de dicho videojuego, en el que también aparece música de Chromatics.
Actualmente VV trabaja en la música para un filme norteamericano independiente llamado Streets Of Vengeance. Hace un par de años el mismísimo Giorgio Moroder publicó en su pagina de Facebook y le dio el visto a una de sus canciones hace una especie de tributo a “The Chase”, tema de la película Midnight Express (1978).
El nuevo álbum de Vestron Vulture, titulado Quarter-Life Crisis que fue lanzado hace pocos días, se compone de distintas corrientes synthwave como italo disco, synthpop, witch house y dark wave. La mezcla de todo esto da como resultado algo que el músico regiomontano llama nu goth/dethwave.
Un claro ejemplo de lo que hace diferencia en este álbum de todos los anteriores es la primera canción: “Gothstar”, que trae la misma energía pero ahora con una especie de atmosfera oscura y synthes siniestros estilo Claudio Simonetti (Goblin).
Parece que Vestron Vulture cambió los atardeceres cálidos y las playas por las noches en sitios suburbanos. “Eternal” es una bella pista instrumental que parece salida de alguna película SCI-FI con Linda Hamilton, como Black Moon Rising. “Hi-Ex” al igual que otras canciones del disco podrían reunir a la gente del Patrick Miller y el Dada X y ponerlos a bailar.
El primer sencillo del disco se titula “Quiero Olerle el Cabello a Ximena Sariñana” y sería interesante que al momento de escucharla intenten descifrar la letra, que es como una declaración de amor expresada en una electro gothicumbia muy pegajosa. Esta canción podría destruir la etiqueta underground de este chico de 25 años. Pero una de mis favoritas es “I Never Spent the Night at Any of My Friend’s Houses When I Was a Kid”, y no se trata de un cover de los Smiths. Tiene unos burbujeantes arreglos de sintetizador y bajo constante con ritmo lento con una melancolía que se ve acentuada por el vocoder, como si se tratara de un dream pop sin guitarras.
Échense un clavado en su música, porque además el arte de cada portada ha sido hecho por él mismo, y al menos yo, ya quisiera tener alguna copia de este maravilloso LP en vinilo color neón.