ALEJANDRA HERRERA
Complejidades sonoras generadas con instrumentos aparentemente básicos.
Antonio Sánchez es el genio detrás de gran parte del score del filme de Alejandro González Iñárritú. Con piezas breves, pero con una amplia variedad rítmica, Sánchez logra cautivar al escucha gracias a su impresionante manejo de las percusiones que le permiten al músico generar verdaderas complejidades sonoras a partir de instrumentos aparentemente básicos.
Pero debe mencionarse que dicha complejidad sonora no está vinculada con la saturación, la repetición o el énfasis desmedido, ya que cada uno de los temas en verdad se percibe justo, ideal y único; no les hace falta ni les sobra algo. Además, si por alguna razón se escucha primero el soundtrack sin haber visto la película, se incrementa el interés por conocer las escenas para las que se crearon estas piezas, ya que su cualidad abstracta, mas no sencilla, hace imaginar sinfín de situaciones.
La interpretación en vivo de esta parte del score sería un suceso enorme y no suena descabellada, ya que Sánchez recurrió a la improvisación para crear estos temas. La otra parte del soundtrack es más clásica, y connota momentos dramáticos y melancólicos. Pero sin duda estamos frente a un álbum que podría ser nominado para ser reconocido tanto por la industria cinematográfica como por la musical, ya que destaca sobre otras creaciones sonoras para acompañar a un filme.
Tracks destacados: “Get Ready”, “Doors and Distance”, “Internal War”, “Fire Trail”, “The Anxious Battle For Sanity” y “Mahler|Rückert-Lieder: Ich bin der Welt abhanden gekommen”.
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